El año pasado no tuve la oportunidad de visitar tan si quiera la isla Norte y desafortunadamente no había probado ningún vino de Martinborough. Varias personas con buen criterio enológico hablaban muy bien de estos vinos, y no se equivocaban.
Martinborough se encuentra al sur de la isla Norte de Nueva Zelanda, perteneciente a la región de Wairarapa, a una hora de Wellington (aproximadamente). Para muchos tiene el clima y el terreno perfecto para el cultivo de Pinot Noir. Esta zona empezó a conocerse más a partir de que una botella de Martinborough Vineyard fuese considerada como el mejor Pinot del mundo, superando a los vinos franceses. Que decir queda que se aleja de las grandes produciones de Marlborough u otras áreas de Nueva Zelanda.
Visité 4 bodegas, me quedé con ganas de más, pero muchas estaban cerradas para catar.
El primer tasting que hice fue en Palliser. Probé dos Sauvignon Blanc (tienen dos marcas), dos Chardonnay, un Riesling, un Pinot Gris y un Pinot Noir. Los Sauvignon nada que ver con sus vecinos del sur, mucho más maduros, sin esos verdores. Los Chardonnay tenían buen paso por barrica. Me sorprendió especialmente el Riesling, con una intensidad aromática altísima y muy seco (luego probé más y era la tónica general, pero creo que este fue el mejor). La Pinot estupenda, floral, frutal, mineral y con buena estructura y calidad precio bastante bien.
Después fui a la afamada Martinborough Vineyard. Aquí probé un Sauvignon Blanc, un Chardonnay, un Pinot Gris, un Riesling y tres Pinot Noir. Comentar que el Sauvignon era muy verde Marborough style, el Riesling con bastante azúcar residual, el resto de blancos muy normalillos. Las tres marcas de Pinot Noir eran Te Tera, Burn Spurt y Martinborough Vineyard. El Te Tera una relación calidad precio realmente buena y el Martinborough Vineyard, complejo, buena fruta, buena madera, posiblemente el mejor Pinot de los que probé, también decir que era bastante caro.
La siguiente visita fue a Schubert, recomendación directa que me hicieron en Palliser. Visita interesante de una bodega que elabora cosas diferentes. Probé un rosado, un blend blanco, un Pinot Noir, un blend tinto y un vendimia tardía dulce. Me sorprendió especialmente el blend tinto, donde salían notas de Cabernet Sauvignon sobretodo y con un nombre curioso y latino: "Con Brío", me explicaron que quería decir eso, hecho con prisa.
El último tasting que hice fue en Alana. En este caso probé un Sauvignon Blanc, una Grüner Veltliner, un Riesling, un Chardonnay y tres Pinot Noir. Los Pinot eran de distintas parcelas, marcando mucho los distintos tipos de zonas. Me gustó especialmente el Limited Release, un vino que no lo hacen todos los años y que era el mejor de los tres para mi gusto.
Después de esta minigira por Martinborough me dediqué a disfrutar de la zona y fui al Cape Palliser, que como curiosidad es el punto terrestre más alejado de Valladolid.
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